Vistas de página en total

jueves, 28 de abril de 2011

El deber

Muchas veces hablamos del "deber ser" de los "deberes"; pero ¿en realidad tenemos la más remota idea de que significa el deber? Algo ¿moral? , ¿una posición con la que nacemos?, ¿algo social? o ¿ético? Quizás para llegar a entender el deber es necesario establecer una pregunta previa,  acerca de su naturaleza.

Antes de continuar abriría un parentesís para hacer la referencia interesante que hace nuestro idioma con la palabra deber a deuda; y la forma en que pareciera (sobre todo en nuestra población) se conecta con algo que tenemos que dar a Otro a cambio de algo que nos dió- Ahora recordarás el reclamo universal de las madres, que ni siquiera me parece necesario repetir pues tu mente de seguro lo recordó-.  El  deber es el implícito que atá, esa cadena de significados y experiencias de tu progenitora y tu padre te transmiten y que en alguna medida te establece normas de funcionamiento y comprensión de tu entorno; lo natural sería que conforme se da el proceso de individualización vayas eligiendo que te sirve y ayuda a crecer o que por el otro lado puedes rechazar o cambiar.

¿Cuál es la razón por la que el ser humano acepta, o sin aceptar actúa bajo un deber?  es necesario admitir que hay muchas causas, como las hay motivaciones y desmotivaciones algunas más claras y otras no tanto. Todos nos encontramos enredados en una cadena de promesas hechas por nuestros antepasados y por nosotros a los que siguen; el deber es una atadura bajo la cual existimos. La fantasía de nuestros padres y abuelos, los deberes civícos del ciudadano moderno, el deber no es un eje único es la cruza de decisiones que por libertad nos conducen a comprender que en toda relación nos convertimos en negociadores, que continuamente se mueven de proveedores a clientes. El ser humano necesita el deber para relacionarse, dificilmente la interacción entre personas estará ausente de la constitución no hablada de un contrato de correspondencia.

Entonces ¿el deber es implícito a la naturaleza humana? , ¿a nosOtros? Al parecer nos es necesario para coexistir en sociedad, quizás lo no natural son todos aquellas ditorsiones que le hemos dado  a los lineamientos de nuestra interacción. Una atadura puede servir de sostén y ayuda; pero otra puede llegar a sofocar.

Lo interesante sería alcanzar a entender que  a pesar de que el deber es algo cultural necesita de la aceptación del  individuo para poder existir; a lo que voy con ello es que el ciclo del deber  puede ser entendido como yo le debo al Otro para que éste me deba y otorgue algo a mí, que a su vez va implicar que le debo algo; el deber es algo que le debemos a un objeto interno, entendido por la expectativa de una compensación a nuestro esfuerzo y entrega. Es entonces que el deber puede ser entendido como función interna de deberse a sí mismo, de demandarse a sí mismo, algo como esperado o necesario.

Elevaría entonces la idea de que aunque el deber lo entendemos principalmente como una cuestión de interacción, pareciera que tiene de tras fondo una función interna.

Así que exhortaría a todo lector a cuestionarse ver que deberes no le son armoniosos en su andar por la vida,y  reconocer todas las veces que se ha sofocado su libertad.

Como todos los escritos dentro de este blog el tema está sujeto a discusión y crítica, así que no deban y atrevanse a comentar.

sábado, 9 de abril de 2011

Una mosca entra a la habitación.

Brevísima eternidad detrás de cada instante;
una cadena infinita se quiebra,
 libera un suspiro momentáneo;
que por unos micro segundos revela el inicio y el fin,
el porque y para que de la existencia.
Luego de nuevo todo vuelve al silencio;
y la vida sigue su curso;
para  repetir continuamente esta serie de mini sucesos,
casi imperceptibles, uno tras otro.

miércoles, 6 de abril de 2011

La realidad tras el recién graduado

Para muchos de los jóvenes licenciados el hecho de toparse con una realidad distinta, en muchos sentidos, a las expectativas que se crearon llega a ser muchas veces bastante estresante y en algunos casos, frustrante; principalmente porque no es sencillo ni común alcanzar al ideal esperado de gran puesto y sueldo desde el inicio de la vida laboral.
Situación laboral actual
La situación laboral para el recién graduado de hoy no es del todo clara ni positiva, o bueno esto es lo que muestra entre varias fuentes un artículo de la UNAM (publicado en http://noticias.universia.net.mx/en-portada/noticia/2011/01/17/780413/crean-empleos-pero-sueldo.html, enero 2011); visión fundamentada  principalmente por el lento crecimiento de las posibilidades, así como el  hecho de que los sueldos sean bajos. 
Hombre individual, el estrés social
Hoy en día Lipovetsky, un filósofo contemporáneo señala que la preocupación acerca del desempleo es algo que se intensifica a partir del individualismo posmoderno,  concepto que se ha transforma hasta el presente de forma que explica que lo valorado de la persona es lo competitivo y performativo (es decir activo),  principalmente reflejado en los resultados sobre el cuerpo o el trabajo; basta con indagar en nosotros mismos y nuestro entorno, para vislumbrar la existencia de este mandato a la productividad.
Entendiendo el trasfondo filosófico cultural que existe en este individualismo moderno es que se entiende el miedo que puede generar el fallar, siendo que se convierte en algo autodestructivo (por ejemplo sería buena la reflexión más a fondo acerca del caso específico de los ninis y la relación desempleo-crimen organizado, como una respuesta a la sensación intensa de fracaso).
Recién graduado desubicado
El recién graduado moderno vive expectativas, como señalábamos anteriormente; sin embargo el estrés y la sensación de fracaso son intensificados cuando influido por una cultura de individualismo posmoderno y demandas externas (la familia, amigos y entorno en general),  cae en auto-exigencia no auténtica en la que puede llegar a perderse y renunciar al valor de su tiempo, capacidades y aprendizaje; provocando en muchas ocasiones decisiones apresuradas y no premeditadas alejadas de cualquier concepción de un plan de carrera. Otro vertiginoso efecto de lo que podríamos llamar estrés  del graduado es el desarrollo de negocios o proyectos sin pies ni cabeza, llegando en ocasiones a producir pérdidas monetarias, de energía y de tiempo, implicando un aumento exponencial en la sensación de decepción.
Pronóstico
En general este es un tema bastante vasto, del cual todos tenemos algo que decir desde la experiencia personal y lo profesional; pues tiene consecuencias trascendentales en todos los campos sociales de la actualidad. Su reflexión debe generarnos interés y movernos a realizar propuestas y actuar; pues según señala la ANUIES (Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior de México, 2003) no se ve en prospectiva un equilibrio adecuado entre la oferta y demanda de profesionistas, y en realidad eso puede tener efectos devastadores de no actuar  nosotros de forma asertiva.
Y tú ¿qué propones o puedes comentar? Parte de lo interesante de los medios de web 2.0 es el nuevo rol del lector activo frente una opinión, mismo que hace de un texto algo en construcción más allá del punto final. Me parece que el concepto de individualismo posmodernos es en si todo un tema del cual se puede discutir y construir mucho.